martes, 22 de diciembre de 2009

Nota de prensa del colectivo de Castellón

Article d'opinió publicat avui a Mediterraneo

¡Sáhara libre!

La lucha de Aminetu Haidar por regresar a su casa, a El Aaiún, ha servido para que por fin el conflicto saharaui saltara a las portadas de los medios de comunicación, para que las nuevas generaciones conocieran que el Sáhara Occidental fue colonia española hasta 1975, año en que fue ocupado por el reino de Marruecos, con el visto bueno de Juan Carlos I que en esos momentos era el jefe interino del Estado español. El pecado mortal del pueblo saharaui era vivir en un territorio rico en minerales, cerca de un mar lleno de bancos de peces y a una latitud idónea para controlar la costa atlántica de África.

El pueblo saharaui en estos momentos vive dividido. Unos lo hacen en los territorios ocupados, donde los derechos humanos sencillamente no existen porque las detenciones ilegales, el crimen de estado y las torturas están a la orden del día. Otros se encuentran en los campamentos de refugiados en uno de los desiertos más inhóspitos del planeta, en tierras argelinas, sobreviviendo con la siempre escasa ayuda humanitaria.

Ni la sentencia del Tribunal Internacional de La Haya (que niega cualquier soberanía marroquí sobre el Sáhara Occidental) ni las múltiples resoluciones de la ONU (exigiendo un referéndum de autodeterminación) han suavizado lo más mínimo el homicida dominio alauí sobre el pueblo saharaui.

España tiene una responsabilidad histórica con el pueblo saharaui, pero nuestros gobiernos, todos, desde la Transición hasta el actual, han preferido sentarse en la mesa de los asesinos para repartirse las riquezas que no les pertenecen. Han puesto los intereses económicos por encima del derecho de los y las saharauis a vivir en paz, en su tierra. Treinta y cuatro años de dolor e injusticia no han hecho retroceder a los y las saharauis. Y, aunque no lo digan, continúan esperando algo más que buenas palabras.

Aminetu ya está en casa, pero su lucha, que también es la nuestra, no acaba aquí. El pueblo saharaui no cesará hasta que pueda ejercer su derecho de autodeterminación para conseguir un Sáhara libre.

Marina Albiol

Diputada de Esquerra Unida en Les Corts


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