Nota de prensa del colectivo de Castellón

ESQUERRA UNIDA EXIGE QUE SEA REIVINDICATIVO FRENTE A LA DIPUTACIÓN Y LA GENERALITAT


Marina Albiol, diputada de Esquerra unida, considera irresponsable que Alberto Fabra aumente el presupuesto de Castellón en 34 millones, justo cuando la inversión de la Generalitat y la Diputación es más baja. “En una coyuntura de crisis, la ciudad de Castellón y sus ciudadanos no tienen que pagar los aires de grandeza del alcalde Fabra ante la morosidad de otras administraciones, que no cumplen con sus obligaciones”.
La diputada considera tremendamente grave que el consistorio municipal se vea en la obligación de vender patrimonio para poder afrontar el presupuesto del 2010. “En estos momentos, la Generalitat y la Diputación agobiadas por las deudas, y con las cuentas en números rojos, han abandonado al Ayuntamiento de Castellón, que va a tener que vender, recordémoslo, el patrimonio de todos y todas, para afrontar un presupuesto irreal y con muchas de las promesas incumplidas del 2009”.
Desde Esquerra Unida se anima al gobierno del Partido Popular que sean valientes y reclamen el dinero que por derecho les corresponde tanto a la Generalitat como a la Diputación pues “independientemente del color político las administraciones provinciales y autonómicas no pueden dejar en la estacada a los municipios, un recorte del 72% por parte del Consell en su inversión en Castellón es inadmisible, nos están tomando el pelo”.
A juicio de la diputada, la Generalitat y la Diputación han dejado abandonado al Ayuntamiento de Castellón, que ve como las inversiones y las ayudas prometidas son inexistentes. “En estos momentos nos encontramos con una Generalitat y una Diputación con graves aprietos económicos productos de una desastrosa gestión y de un despilfarro del erario público en macroeventos, y no pueden cumplir con sus obligaciones con los municipios”.
Albiol, considera que si existe algo por lo que destaca el gobierno de Castellón es por su desmedido gasto, “el equipo de gobierno del PP en Castellón se dispone a tirar la casa por la ventana, mientras, las administraciones provincial y autonómica, arruinadas, han tenido que contener sus gastos, en Castellón se aumenta significativamente, en más de 34 millones con respecto al ejercicio anterior. “Esto no parece una política económica seria y adecuada en tiempos de crisis, el PP pretende despojar al Ayuntamiento de su patrimonio, que al fin y al cabo es de todos y todas, a fin de salvar la cara y realizar un poco de propaganda”.

Castellón, 12 de enero de 2010
GABINETE DE PRENSA DE ESQUERRA UNIDA